euskadiko langile komisioak | 20 abril 2024.

CCOO urge al Gobierno vasco a condicionar la recepción de los fondos europeos a la generación de empleo de calidad

  • A pesar de que septiembre recupera parte de la perdida de agosto, el número de demandantes de empleo sigue disparado.
  • Continuamos con 1.113 personas afiliadas menos que hace dos años.

Los datos SISPE para Euskadi facilitados por Lanbide en el mes de septiembre 2021 suponen una buena noticia en la media que reduce parte (-2.768) del aumento del desempleo de agosto y sitúa el número de desempleados en 119.492.

04/10/2021.
Foto: Europa Press

Foto: Europa Press

Los datos están, esta vez sí, en consonancia con lo ocurrido en el conjunto del Estado. El número de demandantes de empleo ha continuado descendiendo en -10.455, con una notable caída de los demandantes ocupados (-9.361) si bien todavía hay casi 90.000 demandantes de empleo ocupadas más que antes de la pandemia. El número total de demandantes de empleo es de 360.563 personas

En todo caso, como mostraron los datos de los institutos estadísticos la recuperación de empleo acontecida no está siendo aprovechada para cambiar las bases de un mercado de trabajo precario.

El descenso del paro aunque ligeramente entre las mujeres (-1.570) aunque es proporcionalmente igual para ambos sexos, por lo cual las mujeres siguen representando el 56,7% de las personas en paro y continua habiendo 1.635 mujeres paradas más que antes de la pandemia. 

La contratación ha vuelto a aumentar tras la caída de agosto, por ello en septiembre lo hace proporcionalmente por encima (+60%) de la media del estado, pero la variación anual (+15,4) es menor que el conjunto del Estado. 

La contratación indefinida crece proporcionalmente más que la temporal, aunque en la variación anual seguimos también por debajo de la media estatal. Como resultado sólo el 9% de la contratación acumulada en el año ha sido indefinida por debajo del Estado.

La afiliación a la seguridad social también vuelve a números positivos. Recupera 5.355 personas afiliadas (de los 11.810 perdidas en agosto), siendo 4.693 mujeres. En relación al pasado año supone una recuperación de 12.542 personas repartidas casi proporcionalmente igual entre hombres y mujeres. 

El crecimiento viene de la mano del régimen general, no obstante algunos sectores han perdido afiliación. En este sentido destacan comercio (-1.096) y actividades sanitarias (-1.797). La actividad económica que ha provocado el incremento de la afiliación ha sido hostelería, con 4.546 afiliaciones más. La afiliación media refleja un incremento de 1359 personas más que hace un año, pero 1.113 menor que hace dos años en el régimen general. 

El dato más preocupante, viene de la mano de la afiliación a la seguridad social que agrava, respecto a julio, su caída. La afiliación media en agosto ha sido de 11.810 personas afiliadas menos que en julio, especialmente en el régimen general y con mayor incidencia entre los hombres.

A pesar de los buenos datos es necesario recordar dos conclusiones; primero, a pesar de la mejoras continuadas de las grandes cifras, todavía la situación es peor que el periodo antes de la pandemia y queda por tanto camino por recorrer; segundo, la recuperación se está haciendo a consta del incremento de precariedad (temporalidad y parcialidad), con los mismos esquemas de siempre. 

Frente a esta realidad, hay que insistir en los beneficios de la recuperación económica debe llegar ya a las personas trabajadoras y para ello no se puede dilatar más en el tiempo la derogación de las reformas laborales.

En nuestro ámbito se debe exigir al Gobierno vasco que la llegada de los fondos Next Generation para la recuperación y la modernización productiva, que con tanto ahínco reclaman al gobierno central, deben condicionarse a la generación de empleo de calidad y la consecución de un mercado de trabajo justo caracterizado por el empleo estable y de calidad.

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