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Dos empresas que trabajaban para el Consorcio de Aguas intentaron ocultar un grave accidente de trabajo

  • El trabajador, que hora tiene una incapacidad permanente total por el accidente, cayó a un foso de 3 o 4 metros y los responsables de la obra se negaron a llamar a los servicios sanitarios.

La acción sindical de CCOO ha conseguido que ambas empresas tengan que pagar un recargo de prestaciones del 40% al trabajador accidentado en una obra de la depuradora de Galindo y una sanción por conducta grave.

09/12/2019.
Foto: Europa Press

Foto: Europa Press

La Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Bizkaia ha emitido una resolución por la que se propone un recargo de prestaciones del 40% para el trabajador J.F.A. tras sufrir éste un accidente laboral el 12 de febrero de 2018. J.F.A era trabajador de la empresa Sistemas de Reparación y Protección del Hormigón SL, y cayó de una altura de entre tres y cuatro metros, fracturándose la tibia, el peroné y el calcáneo. El trabajador ha estado de baja durante un año y durante ese periodo le han tenido que practicar varias intervenciones quirúrgicas. Finalmente y debido al alcance de las lesiones, la Seguridad Social le ha reconocido una incapacidad permanente total para su profesión de albañil.

El accidente tuvo lugar en la EDAR de Galindo, siendo promotor de la obra el propio Consorcio de Aguas, que contrató la obra con UTE Desbaste Galindo, unión compuesta por Initek Ingenieros SL y Vías y Construcciones SA. La empresa Sistemas RPH SL, empresa del trabajador accidentado, actuaba como subcontratista de primer nivel. La Inspección de Trabajo ha propuesto el recargo de prestaciones de forma solidaria a UTE Desbaste Galindo y Sistemas RPH SL, empresas que también tendrán que hacer frente a una sanción por conducta empresarial tipificada como grave por infracción en materia de prevención de riesgos laborales

El accidente sobrevino al caer el trabajador al fondo de un foso, por un lugar donde no existía protección colectiva que impidiese la caída a distinta altura. El trabajador fue sacado del foso por personas que trabajaban en la obra y posteriormente trasladado a la mutua correspondiente en un coche particular, puesto que los responsables de la obra optaron por no avisar a los medios sanitarios oportunos.

La Inspección de Trabajo dice textualmente en su resolución que “se trata de un accidente de trabajo producido por una caída en altura cuya realidad, en un principio y teniendo en cuenta los informes de investigación del accidente realizados por la UTE Desbaste Galindo y el informe inicial realizado por Sistemas RPH SL, se intentó enmascarar por las empresas indicadas”. Si bien los primeros informes indicaban que la caída se había producido desde peldaños de una escalera cercanos al suelo, y no siendo esta caída desde tan poca altura compatible con las graves lesiones del trabajador, la Inspección de Trabajo entendió que los informes inicialmente realizados no expresaban la realidad de los hechos. Los nuevos informes de investigación que se entregaron a la Inspección de Trabajo reflejaban ya la caída desde cuatro metros de altura.

CCOO ha considerado deplorable que no se optase por avisar a los servicios médicos de emergencia ante un accidente de tanta gravedad, sobre todo teniendo en cuenta que al ser el trabajador sacado del foso y evacuado a la mutua por personal no especializado, cabe la posibilidad de que se hayan agravado las lesiones que en un primer momento padecía el trabajador. El sindicato considera que vuelve a ponerse en evidencia que la subcontratación, cuando no hay una adecuada coordinación entre las empresas concurrentes en un centro de trabajo, es un factor que genera siniestralidad laboral.

CCOO está estudiando la posibilidad de iniciar la reclamación de daños y perjuicios frente a las empresas implicadas. Por otra parte, el sindicato exige al Consorcio de Aguas que extrema la vigilancia en relación a la coordinación para la prevención de riesgos en el trabajo de todas sus contratas y subcontratas.