euskadiko langile komisioak | 24 abril 2024.

Los malos datos del empleo desmienten los discursos triunfalistas

  • El número de personas en desempleo que no cobra ningún tipo de prestación sigue aumentando y ya representan el 59,6%.
  • La supuesta recuperación viene marcada por la mala calidad del empleo, por la bajada de las condiciones laborales y de los salarios y la precaria contratación, con contratos de muy escasa duración y, por tanto, con un aumento continuado de la desprotección posterior.

Los datos de Lanbide correspondientes al mes de agosto vuelven a poner de manifiesto el fuerte peso de la estacionalidad en la evolución del desempleo y, sobre todo, desmienten a los gobiernos en sus intentos electoralistas de mostrar una recuperación sostenible del mercado de trabajo.

07/09/2017.
Foto oficina de Lanbide

Foto oficina de Lanbide

En el mes de agosto en Euskadi el paro aumentó en 2.338 personas respecto a julio (queda en 133.210) lo que ha representado un incremento del 1,8%, dato superior al aumento del pasado año (1,2%), y por encima del 1,4% que se produce en el Estado.

Nuestra Comunidad Autónoma es, además, una de las que menor mejoría presenta en términos interanuales y reduce (-6,9%) en menor proporción que el conjunto del Estado (-8,5%) el número de parados.

La reducción del paro se ralentiza (en el último año el desempleo se ha reducido menos de lo que se redujo el pasado año, un 8,1%), pero la calidad del empleo continúa precarizado de forma evidente a través del mantenimiento de la temporalidad, la disminución de la duración de los contratos y sobre todo con el abuso de la contratación a tiempo parcial. El número de demandantes de empleo (275.375) casi dobla al de parados (133.210) representando el 48,8%.

A pesar de que el paro ha descendió en -9.904 personas en el último año el número de ocupados demandantes de empleo ha aumentado en 11.589 en un año, casi el doble que el pasado año que a su vez dobló el anterior. A pesar del notable descenso de este mes de agosto, 122.755 personas con ocupación están demandando empleo en Lanbide.

Otro dato que destaca CCOO es que pesar de que en el mes de agosto el paro ha aumentado más entre los hombres (1.400), en términos interanuales el paro desciende menos entre las mujeres que ya representan el 56,5% de las personas paradas, (55% en agosto de 2016)

Menos prestaciones

Solo 52.813 personas entre los desempleados/as están cobrando algún tipo de prestación, 5.064 menos que hace un año (57.877 en 2016 y 67.000 en 2015), lo que representa que el 59,6% de las personas en desempleo no cobra ningún tipo de prestación. Hace un año era el 59%, hace dos el 57% y hace tres el 52,6%. Esto es, se sigue agravando la situación de desprotección social y además se agrava también en términos cualitativos.

La contratación acumulada del año muestra que solo el 7,6% de los contratos han sido indefinidos, la proporción es ligeramente superior a la de hace un año (7%). Es decir la calidad de la contratación no mejora a pesar de la pérdida de condiciones y derechos de la contratación indefinida.

La afiliación a la seguridad social también ha descendido. En agosto ha habido de media -11.944,68 afiliados menos que en el mes de julio, un descenso superior a los ocurridos en los pasados año (-10.787 en 2016 -9.819 en 2015 y -7.334 en 2014).

Lo cierto es que situación a pesar de los mensajes triunfalistas, como el de la semana pasada por parte de la Ministra Fátima Báñez, sigue siendo muy incierta en lo económico e insostenible socialmente. La supuesta recuperación viene marcada por la mala calidad del empleo, por la bajada de las condiciones laborales y de los salarios y la precaria contratación, con contratos de muy escasa duración y, por tanto, con un aumento continuado de la desprotección posterior al no poder generar ni prestaciones ni subsidios.

Una autentica recuperación no será posible mientras no se produzca un cambio en la política económica que ponga a las personas en el centro de su acción. El reto más importante de los próximos presupuestos debe ser revertir la desigualdad y precariedad que ha dejado las reformas laborales y las políticas de austericidio.

CCOO compromete sus esfuerzos a lograr acuerdos por el empleo estable y de calidad y priorizará el desbloqueo de la negociación colectiva